JIM MORRISON, DEL LEGADO MUSICAL CON THE DOORS AL "CLUB DE LOS 27" EN UNA SOSPECHOSA MUERTE

Jim Morrison, cantante de The Doors, falleció el 3 de julio de 1971, día en el que el reconocido músico entró en el "club de los 27", como se llama a los artistas fallecidos a esta edad tan precoz, como Kurt Cobain, Jimi Hendrix, Brian Jones y Janis Joplin, entre otros. Además de un valioso legado musical que combina rock con expresiones psicodélicas y toques de blues, el talentoso vocalista dejó un enorme signo de interrogación alrededor de su misteriosa muerte.

La banda decidió tomarse un descanso luego de la grabación de L.A. Woman, un álbum en donde predominó el blues, y Morrison decidió mudarse a París con su novia, Pamela Courson.

El 16 de junio de ese año, el vocalista realizó sus últimas grabaciones conocidas junto a dos músicos callejeros a los que invitó a cantar a un estudio y que años después se estrenarían en un disco pirata llamado "The Lost Paris Tapes".

La revista Rolling Stone ubicó a The Doors en el selecto listado de los 100 mejores artistas del rock, puntualmente en el puesto 41.

Su clásico ‘Light My Fire’, uno de los himnos de la banda, también ostenta un lugar privilegiado en la historia del rock, por tratarse una de las mejores 500 canciones de todos los tiempos (puesto 35), según la misma revista.

La pieza, producida en 1967, "catapultó a los Doors a la fama de la noche a la mañana", observan en Rolling Stone. La combinación sutil de los teclados con la voz sensual de Morrison cristalizaron la identidad musical de la agrupación, ya dueña en ese entonces de un estilo inédito: un rock al estilo The Doors.

El misterio alrededor de la muerte de Jim Morrison

El fatídico 3 de julio, se encontró el cuerpo de Morrison en su bañera. Si bien se determinó que murió por un ataque al corazón, luego se supo que no se le había hecho ninguna autopsia antes de ser enterrado en el cementerio Pére-Lachaise el 7 de julio.

En torno a su deceso se tejieron múltiples versiones. Una de la más difundida señala que su trágico final se produjo por sobredosis en un bar de Paris, donde un grupo de conocidos lo habría trasladado al baño de su casa.

Asimismo, se supo que la novia del cantante mantuvo el cuerpo durante más de 4 días en el apartamento y le depositaba hielo para detener parcialmente el proceso de descomposición.

A su muerte y su posterior ingreso al llamado "club de los 27", Jim Morrison había dejado un legado de 9 álbumes con su banda insignia y millones de copias vendidas en todo el mundo.

La banda decidió seguir adelante y lanzó dos discos más de moderado éxito con Ray Manzarek y Robby Krieger como voces líderes.

Años después, Manzarek hablaría del cantante como un muchacho muy agradable, que se ponía de mal humor cuando tomaba, pero agradable al fin.

En 1978 el trío lanzó un disco llamado "An American Prayer" en donde le daban música a diversos pasajes poéticos que Morrison había grabado en años anteriores. Esto revitalizó al grupo y lo volvió a poner en el centro de la escena.

Su vida y obra fue llevada al cine en varias oportunidades, y en todas sus amigos más cercanos, miembros de la banda y sus familiares fustigaron contra la imagen un tanto caricaturizada que daban de él en las cintas.

En el epitafio del cementerio de Francia donde descansa, puede leerse la frase en griego: "Contra el demonio dentro de ti mismo".

 

Fuente: Radio Perfil

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