LA INMENSIDAD
La viuda de Cliquot es un muy interesante film francés, ambientado en el siglo XIX, que muestra las dificultades que tuvo la protagonista para hacerse cargo de la bodega de vinos finos que dirigía junto con su esposo, una vez muerto éste, a pesar que ella era la que junto a él experimentaba en nuevos sabores y diferentes uvas para lograr mejores resultados en la muy difícil época de las guerras napoleónicas.
Tanto que ella debió permanecer viuda para seguir poseyendo la bodega, que le sería enajenada en caso de un nuevo casamiento, como si su marido muerto siguiera rigiendo los destinos, desde su propia tumba. Y a pesar que la protagonista, según la impronta histórica que muestra la película gala es prácticamente la inventora del champagne que ahora conocemos, de burbujas finas y derivado de la uva pinot-noir; después de largas y dificultosas experimentaciones, malogradas algunas por la locura que invade a su esposo antes de su dolorosa muerte y por la guerra acechando por oleadas la región vitivinícola.
Su heroicidad y el exitoso invento que perdurará a través de los siglos, inclusive su bodega fundadora y desde ya, su obstinado rigor al decir de Leonardo, son un vivo ejemplo del genio femenino, negado y hasta malogrado a través de toda la historia de la especie humana.
Curiosamente y casi al mismo tiempo se estrenó otro film, esta vez italiano y ambientado en mitad del siglo XX, titulado L´Inmensitá (La Inmensidad) en castellano, que tiene a Penélope Cruz, la famosa actriz española, encarnando a una ama de casa romana, de una familia pudiente, donde se muestra la total dependencia de la mujer italiana de su época, con respecto a su marido.
Hoy como ayer, las mujeres lavan platos; ¿qué significa saber hacerlo?
Destinada, como una parte del rebaño, a tener hijos y permanecer en la casa, sujeta a los caprichos y al maltrato cotidiano de su propia pareja, que en este caso, provoca en ella raptos de locura, que culminan con una infructuosa rebelión, o sea, la internan como si estuviera loca, para luego hacerla reingresar al rebaño.
A su vez, en dicho film se muestra cómo el protagonista masculino en ningún momento, en presencia de su propia madre y de los hijos que comparte con el personaje encarnado por Penélope Cruz, pierde el manejo férreo de la situación doméstica, hasta con raptos de violencia cotidiana, aceptados como naturales por la totalidad de su propia familia.
Pero este machismo a ultranza lo vemos también en este personaje tragicómico encarnado por Nicolás Maduro, que se ha permitido, adelantar la fecha clásica de la Navidad al 1º de Octubre, convirtiéndose en alguien que se permite modificar el calendario gregoriano, después de siglos de su práctica habitual.
O sea, como de costumbre, el realismo mágico latinoamericano supera cualquier ficción, imaginada por los escritores que encabezaron esa vanguardia literaria.
Sin embargo Ariel Penissi y Miguel Benasayag, en el Diario Perfil, nos hablan de los outsiders, que se podrían denominar como lo haría el inolvidable Eduardo Pavlovsky también obscenos, o sea actores fuera de escena que irrumpen en el siglo XXI, como El hombre sin atributos de Robert Musil, encarnado en un matemático, cuyas abstracciones numéricas nada tienen que ver con la complejidad de la vida.
La inmensidad del patriarcalismo atraviesa la historia universal, que se ha afincado en las religiones que han pululado a lo largo del tiempo y que ha ido negando el valor y la presencia de las mujeres"
Pero funcionan a la perfección para los encadenados, como en la famosa caverna de Platón, ahora a las redes. Aunque en realidad, estos outsiders no existen para la complejidad creciente de este siglo, sino para este renovado rebaño en la nube, o sea, para aquellos que al decir clarividente en el siglo XVII de Baruch Spinoza, aceptan, aquí y ahora, “trabajar por su esclavitud como si fuera su libertad”…
Y en el libro de Rocco Carbone que también presenta el Diario Perfil, que se titula Lanzallamas también aparecen claves precisas de comprensión de esta realidad líquida, o sea, de este renovado Cambalache del siglo XXI.
“El rol de la mujer mejora la política”
Y dichas claves aparecen en la pluma incisiva de Roberto Arlt, que se enlaza con la fatídica fecha del 6 de septiembre de 1930, cuando se quiebra la frágil coexistencia democrática, lograda en 1916 por Roque Sáenz Peña e Hipólito Yrigoyen.
Y dice Arlt a través del jefe de la Sociedad Secreta, el Astrólogo, que pareciera envuelto en la crisis global de 1929 y 1930: “Concebí un proyecto que puede parecer fantástico a una mente mediocre…Ví que el callejón sin salida de la realidad, tenía una única salida y era volver para atrás…”
Y que ha pasado sino con la brutal crisis económica del 2008, resuelta solamente para los bancos, que golpeara desde EEUU y Europa al resto del mundo, sino confirmar en los hechos las palabras del premio Nobel de Economía, el norteamericano J. P. Samuelson, cuando afirmara: “se trata simplemente de zorros libres en gallineros libres”, o sea, la persistencia global del ultraneoliberalismo.
Aparece la lengua confusional; luego de la pausa desestructurante de la pandemia.
Se puede nombrar como Domingo Faustino Sarmiento, nuestro líder educacional al CCK, mientras se desfinancia 43% a la educación en todo el país, se dan de baja todos los programas de incentivo docente, las becas Progresar, los programas de educación sexual, los sueldos docentes yacen en el piso y la construcción de jardines de infantes ya no existe, como denuncia con claridad Mabel Bianco en Diario Perfil.
El sexismo en la consultoría política
Y continúa Arlt: “Nosotros nos permitimos el lujo de ser conservadores, aristócratas, reaccionarios y revolucionarios, legalistas e ilegalistas. Aclara Rocco Carbone, la conjunción de ilegalismo y legalismo es el punto de conexión: fascismo-mafia.”
Luego los fantasmas reaparecen, ya no son Franco ni Mussolini en persona, pero los triunfantes en una de las regiones de la Alemania del siglo XXI, reivindican la figura trágica del Führer y comienzan por negar el genocidio histórico del Holocausto.
Como los reivindicadores del siniestro Proceso de Reorganización Nacional Argentino, siguen negando que los que torturaban, desaparecían seres humanos y los tiraban desde los aviones, se rindieran en la tragedia irreparable de la pérdida de nuestras Malvinas.
O sea, se trata de la inmensidad del patriarcalismo que atraviesa la historia universal, que se ha afincado en las religiones que han pululado a lo largo del tiempo y que ha ido negando, como en los films antedichos, el valor y la presencia de las mujeres; como lo fuera el caso de Clara Wieck, compositora y pianista, pero sólo conocida por haber sido la mujer de Robert Schumann, el músico del siglo XIX.
Y se trata de los machos alfa que, al decir de Elon Musk, vienen para reemplazar a la democracia, negando el calentamiento global y la diversidad sexual, no atendiendo a las reglas institucionales de los países soberanos, como en Brasil y retaceando el valor intrínseco de lo femenino, como lo ocurrido en la Argentina, al borrar el Salón de la Mujer de la Casa Rosada; como si ellas no hubieran existido.
Sin embargo, si queremos ser parte de la Naturaleza, no sus maléficos reyes; recrear las condiciones climáticas de un planeta vivible, y terminar con la amenaza cataclísmica de una guerra nuclear, necesitamos propender y promover el feminizar urgentemente la política, en lugar de los machos alfa con su rebaño de esclavos.
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