ASí FUE LA BODA 'SECRETA' DEL TORERO VICENTE RUIZ 'EL SORO' Y EVA ROGEL: TRAJE BLANCO Y UN TESTIGO DE EXCEPCIóN
La suya no ha sido una historia de amor fácil pero sí una historia de amor con final feliz. Vicente Ruiz El Soro y Eva Rogel se convirtieron en marido y mujer en septiembre de 2022, dos años después de que su primer enlace, en 2020, fuese anulado. Pero para entender cómo el destino ha movido sus hilos para unir al torero con su esposa hay que remontarse al año 1984. Entonces eran novios y la muerte de Paquirri causó tal impresión en El Soro que pidió la mano de Eva, de entonces 16 años, a su padre. Él se negó y las circunstancias les hicieron continuar por caminos separados.
Hace diez años, Vicente y Eva se reencontraron en un programa de televisión y descubrieron que la chispa seguía ahí. Retomaron su relación y afrontaron juntos el momento más difícil de sus vidas: una sepsis que sufrió el torero por una prótesis de rodilla. La infección se extendió y lo llevó a ingresar en estado crítico en la UCI del hospital Clínico de Valencia. Antes de entrar en quirófano a vida o muerte, la pareja se dio el "sí, quiero" en el mismo centro médico. "Ha sido una boda atípica, no la idea que yo tenía, pero era un ilusión que él tenía y desde que enfermó era algo que a todo el mundo que entraba le pedía por favor", contó la novia entonces. El enlace lo ofició Sergi Ruiz i Alonso, el alcalde de Foios, pueblo natal del diestro, y contó con la presencia de su hijo Tito. Sin embargo, la ceremonia se invalidó cuando un jefe del equipo médico dijo que Vicente estaba bajo los efectos de un medicamento. Semanas más tarde, El Soro salió del hospital con una nueva ilusión: casarse con el amor de su vida.
Lo consiguieron, esta vez sí, en septiembre de 2022. "Es un sueño hecho realidad. Eva es una mujer extraordinaria, muy especial, que ha estado conmigo en lo bueno y en lo malo. Intentamos casarnos a principios de 2020 en el hospital, cuando yo me encontraba muy enfermo, pero no pudo ser", dijo entonces. La ceremonia fue civil, en un juzgado de Valencia, donde residen, y con la presencia de un testigo de excepción: el padre de la novia, el mismo que le negó la mano de su hija al Soro a finales de los 80. Él llevaba traje oscuro, ella un elegante traje blanco. "Son muy felices, no sabéis cómo se quieren", ha contado Beatriz Cortázar en Antena 3 este lunes.